FINAL DE LA GIRA EN LA COMUNIDAD DE MADRID

Con su característica e impecable voz y deslumbrantes movimientos encima del escenario, María Villarroya ante un público entregado que se dio cita en San Sebastián de los Reyes, cerró su Gira por la Comunidad de Madrid.

Durante las cerca de dos horas de función, María llevó al público a un viaje íntimo y muy personal sobre su propia vida y puso punto y final a una Gira por distintos municipios de Madrid, plagada de éxitos.

Las sensaciones encontradas para el público en este trabajo de mujer llegó un día tan emblemático como el 8 de Marzo, el Día Internacional de la Mujer, donde todo el equipo femenino de Silencios Cantados abanderó el día,  llevando camisetas con una de las frases más emotivas y rompedoras de la función. “¿Estás mejor?…¡sí, estoy mujer!” un emblema que sobrevuela durante todo el espectáculo musical.

La vuelta de tuerca a su propia vida, las palabras, poemas  y movimientos trazados a cámara lenta, pero a la vez firmes, que denotan una energía poderosa, tan de MUJER, con ese cierto aire alado (su canción Alas no puede ser más adecuada) dejan al público no sólo fascinado por su arte y su interpretación, que queda enamorado de María, la actriz, y de la mujer, con su maravilloso saber estar  (quisiera evitar la mención a la elegancia, tan usada cuando se trata de arte), pero es que María Villarroya indudablemente, expresa con sus gestos, una disposición natural a la elegancia con: su cuerpo, sus manos, su voz prodigiosa, y su lenguaje gesticulado que parece que dice lo que en realidad calla.

Donde no llegan las palabras, llegan los gestos, las muecas, los vacíos, las miradas, quizá todo forma parte de la magia de la actriz o del espectáculo, o quizá podría ser pura realidad, puro carácter, puro arte.

Su luz deja los escenarios madrileños para encontrar nuevas víctimas de su hechizo artístico y embarcarse en un camino hacia sudamérica, primero México, después quién sabe… Quien ha tenido el placer de ver su espectáculo musical y conocerla al final de este, con su ya característica naturalidad plagada de claveles para todos, sabe de lo qué hablo.

María Villarroya deja en el espectador un pozo de canciones y  poemas llenos de luz y color que calan en nuestro más profundo ser.

Pero tranquilos, la seguimos y no la perdemos de vista, María Villarroya y sus Silencios Cantados triunfarán allí donde se lo proponga y yo os lo contaré como siempre, con gran admiración.

Sí Sostenido