LA MAGIA DE MARIA VILLARROYA DE NUEVO EN EL ESCENARIO

De nuevo María Villarroya vuelve a hacer magia en el escenario, con una actuación excelente y totalmente renovada, volviendo a brillar en el Teatro Lara con el espectáculo musical Silencios Cantados, la búsqueda de libertad y su oficina de Objetos Perdidos.

La autora volvió, como parece ser ya la costumbre, a emocionar y encandilar a todo el auditorio del teatro, un público entregado que no escondió su entusiasmo en los 90 minutos que dura la función, derrochante de empatía y con ganas de acompañar a la artista en ese torrente de emociones que disipa sobre el escenario. La gran maestría de la dramaturga no hace más que afianzar lo que muchos ya sabíamos desde un principio, y es que un espectáculo como “Silencios Cantados” es único en su género y digno de tener en cuenta en la programación teatral actual.

Si bien las canciones fueron las mismas de siempre, el espectáculo ha dado un giro de 180 grados debido a una reestructuración de guión, incorporando momentos y vivencias de la vida de María, que le dan un toque aún más humano, si eso era posible, que hace que el espectador  empatice más con la artista  y que en ciertos apartados se sienta reflejado ante un espejo. Sensaciones, magia  y contacto con el público que sólo los grandes profesionales, tienen la capacidad de ofrecer, todo ello mezclado con esa dulzura y ese saber estar que desprende en el escenario, dan el colofón final a un espectáculo redondo y a una experiencia vital en la que la autora desnuda su alma. Un “Striptease” emocional que no deja indiferente a nadie.

María Villarroya  cantó mejor que nunca y se lo pasó mejor que nunca y ese disfrute se fue contagiando uno a uno, canción a canción, vivencia tras vivencia a todos los allí congregados. Se mostró pletórica en todas sus canciones, con pasión y con esa emoción que conlleva presentar al público nuevas propuestas. El público conectó desde el primer minuto y esa sensación de empatía que produce el ver disfrutar a tu público flotaba en el escenario, en todos los pasos nuevos que daba, y con ellos, cada uno de los presentes, nos sentíamos especiales sabiendo que formábamos parte de esa primera vez.

El grupo musical liderado por Josué Santos sonó excelente y a una, con la reina de la función, todo fue perfecto. Incluso el tiempo atmosférico parecía estar de parte de María, que decidió finalmente no aguarnos la fiesta, nunca mejor dicho.

Una sinfonía de sensaciones  y emociones llena de matices que llevó a los espectadores a disfrutar de esa experiencia de vida,  desde la risa y la comedia al llanto y la intensidad,  pero siempre con la sensibilidad y la firma de María Villarroya.

“Porque lo he vivido…, lo canto” ya es una máxima en la carrera de María, desde la inocencia hasta la pasión, desde los fracasos hasta las victorias, son englobadas en un gran espectáculo, pero no por ello corriente, digno de tenerse muy en cuenta.

Si eres un espectador amante de las sensaciones fuertes y entregado al arte, no puedes perderte la magia de esta experiencia vivencial.

Os dejo las fechas de las nuevas funciones en la sala Cándido Lara, del Teatro Lara, siempre a las 22:30h :